¡Ay madre!
Cuánto tiempo sin hacer cookies. Y cuanto tiempo sin hacer unas cookies taaaaaaaaaan deliciosas como éstas.
Tras verlas como mil veces en pinterest, he decidido que ya era horita de prepararlas y compartirlas con todos vosotros.
Las cookies son como los colores: hay para todos los gustos.
A algunos les encantan finas y crujientes, otros las prefieren blanditas y gordotas, con un buen tronchón de masa.
Yo me encajo entre éstos últimos. Y si además están cargadas de cosas por dentro ya es que son mi perdición.
Porque si algo tienen estas cookies es "cosas por dentro"
Tienen chips de chocolate, que cuando entran en contacto con el calor del horno ocurre algo mágico: se funden y mezclan con la masa de la galleta y queda una cosa así:
Y tienen... ay tienen...
¡TIENEN OREOS! Si, galletas dentro de galletas, valga la redundancia. ¡Y valga mucho!
Y lo mejor de todo es que con el calor del horno (sí, me repito, lo sé, pero es que es un aparato tan mágico...) se separan las partes de la Oreo y vemos trocitos negros de galleta y partes blancas de crema, que unidas a los antes mencionados chips de chocolate, forman una espectacular creación.
Además de colorida y bonita, oye...
Así que nada, aquí estoy yo feliz con mis galletas y poniéndoos los dientes largos. Aunque he de decir que de las 20 que me salieron, solo me quedan 3... Y las hice el sábado.
No sé que misterio habrá ocurrido en mi casa que han desaparecido todas, lo que me lleva a tener que volver a hornearlas pronto para catarlas a gusto.
Así que nada, como siempre os animo a que las probéis y, si no os gustan las cookies blanditas como a mí, don't worry! Con 2-3 minutitos más en el horno tendréis unas crispy cookies, es decir, unas galletas crujientes espectaculares para mojar en la leche de vuestro desayuno, merienda, cena...
¡Aquí tenéis el recetón! Adaptado de una de mis más fieles fuentes de inspiración en cuanto a cookies se refiere.
COOKIES DE OREO Y CHIPS DE CHOCOLATE
Receta adaptada del blog Sally's Baking Addiction
Ingredientes para 20 cookies:
- 280 g de harina
- 1 cucharadita de bicarbonato
- 1 1/2 cucharaditas de Maizena
- 1/2 cucharadita de sal
- 160 g de mantequilla fundida
- 100 g de azúcar moreno
- 100 g de azúcar blanco
- 1 huevo + 1 yema
- 1 cucharadita de vainilla en pasta
- 100 g de chips de chocolate
- 150 g de oreo troceadas
Elaboración:
1. En un bol, mezclamos la mantequilla fundida con los azúcares hasta que no quede ningún grumo de azúcar.
2. Añadimos el huevo y una vez integrado, la yema y la vainilla, y mezclamos bien.
3. Tamizamos la harina, el bicarbonato, la Maizena y la sal y lo añadimos todo a los ingredientes húmedos, mezclando con suavidad hasta que esté homogéneo.
4. Por último, añadimos los chips y las oreo y mezclamos una última vez.
5. Hacemos una bola con la masa, la envolvemos en film y la refrigeramos durante mínimo 2 horas y máximo 3 días.
6. Precalentamos el horno a 160º.
Transcurrido el tiempo de enfriado, sacamos la masa de la nevera y la dejamos reposar sobre la encimera 10 minutos para poder manejarla mejor. Mientras tanto, preparamos unas bandejas de horno con un tapete de silicona, papel de horno o similar.
7. Hacemos bolas de unas 3 cucharadas de masa, haciendo que sean más altas que anchas para que nos queden bien gorditas. No las chaféis que el calor del horno tiende a aplanarlas y conseguiréis unas galletas muy finas (si os gustan así, no dudéis en hacerlo).
8. Ponemos las bolas espaciadas en la bandeja y horneamos las galletas durante 11-12 minutos. Aunque parezca que están crudas, no sigáis cociéndolas si queréis que os salgan blanditas. Si por el contrario las preferís crujientes, hornead durante 14-15 minutos.
9. Una vez horneadas las galletas, las sacamos del horno y las dejamos reposar sobre la bandeja al menos 10 minutos antes de transferirlas a una rejilla. No las intentéis pasar antes que os las cargáis (si lo digo es por algo, jaja). Tras 10 minutos las pasamos a una rejilla para que terminen de enfriarse por completo.
NOTA:
Una vez frías, las podéis guardar en un recipiente hermético durante 1 semana.
También podéis congelarlas durante 3 meses ya horneadas.
Si os sobra masa antes de hornear, la podéis guardar también en el congelador durante 3 meses y después hornearlas sin descongelar durante 12 minutos.
¡Listas!
Preparadlas, por favor, no os perdáis esta maravilla por la pereza de parar 2 horas mientras se enfrían. Estuvo a punto de ser mi error, pero gracias que "golosidad" ganó la batalla.
Nos vemos pronto con una receta súper especial y amorosa :D
Besitos,
Vaya pinta tienen esas cookies!! con lo que me gustan a mí las oreo. Por cierto unas fotos preciosas Irene...
ResponderEliminarTe han quedado unas galletas de ole!!
ResponderEliminarUn beso
Tienen una pinta espectacular!
ResponderEliminarMe apunto la receta.
Un beso
Una combinación de ingredientes perfecta para unas galletas aún más perfectas =)
ResponderEliminarMe llevo una con tu permiso ;)
Un besote!^^
Bieeen cookies con cosas por dentro, bien cargaditas de condimento como nos gusta jajaja tienen una pinta deliciosa!! Nosotras tambien llevamos tiempo sin hacer cookies porque tienen un peligro... Aqui la excusa perfecta besitis cuantomasdulcemejor.blogspot.com.es
ResponderEliminar